La muerte óntica
Si ha salido el sol es porque mis pupilas se han tragado todo el gris, todo el vacío... Y no es más importante el ser de dentro, que el estar siendo del preciso momento, pregunto. Porque mi presente continuo es completo desastre, deshecho corazón maltrecho y las manos tan secas que no puedo respirar. Te he vuelto a fallar... Me da vueltas la cabeza y lo que de verdad pesa casi hasta ahogarme es tu cruz, toda tu sangre, tallada por mis manos errantes, derramada por mi culpa tan culpable. No sé ya qué decir... Que no te asquees de mí, prometo brillar más mañana y ser la nueva luz que encienda tu mirada porque esta muerte óntica me tiene encarcelada y me lleva por caminos donde solo crece espino. Ando llena de rasguños, cicatrices de tanto alejarme de Ti. Pca.