Se clavan

Las horas que se pasan mientras pienso en las futuras, las dudas que congelan mis ternuras, las veces que me pides, oh Rey de los Cielos, que me aleje más... O menos.

Y ahí está la magia.

Pero yo prefiero verla en tu mirada que me enferma y curarme tus heridas con mi sangre derretida. Porque si para ti es más fácil supongo que te veré antes y a veces se hacen vidas dentro de esos pocos instantes.

Y ahí está la magia.

Se me va a clavar la noche porque hoy no dormiré (de oírle... gritando.)

Pca. Se clavan...

Comentarios

Entradas populares de este blog

Martes diecisiete

Exigencias de sangre

Una nueva perspectiva